Naturaleza AristeguiNaturaleza Aristegui

Documentan nacimiento de lobo mexicano en en Campo Verde, Chihuahua

El lobo mexicano es el cánido silvestre más grande del país. Los adultos miden entre 130 y 180 centímetros de largo, pesan cerca de 33 kilogramos y presentan un pelaje café grisáceo en el dorso, más claro en el vientre y las patas.

  • Redacción AN / RDG
10 Jul, 2025 09:50
Documentan nacimiento de lobo mexicano en en Campo Verde, Chihuahua
Foto: CONANP

Activistas ambientales y conservacionistas celebraron que, por primera vez, se logró documentar el nacimiento de un lobo mexicano (Canis lupus baileyi) en libertad dentro del Área de Protección de Flora y Fauna Campo Verde, ubicada al noroeste del estado de Chihuahua, un hecho que marca un avance en la recuperación de esta especie en peligro de extinción.

El hallazgo se logró gracias al trabajo de Abel Guerrero Tello, integrante del Comité de Vigilancia y Monitoreo Comunitario del Área Natural Protegida, quien al revisar una de sus cámaras trampa notó lo que inicialmente identificó como “un coyote extraño bebiendo agua”. Sin embargo, tras el análisis de las imágenes por César Hernández, jefe del Departamento de la Reserva, se confirmó que se trataba de un lobo mexicano sin collar GPS, lo que indica que nació en libertad.

La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) explicó que este hallazgo ocurrió en una zona cercana a donde han sido liberados otros lobos como parte del programa de reintroducción impulsado por México y Estados Unidos desde 1997. Esto confirma, según la dependencia, que el ejemplar forma parte de las camadas nacidas en vida silvestre registradas desde 2014, lo cual representa “un gran avance en la conservación del lobo mexicano”.

Foto: CONANP

La Conanp resaltó que este tipo de resultados son posibles gracias a acciones integrales como la vigilancia biológica constante, la prevención de incendios, el acompañamiento a ganaderos afectados por depredadores mediante el Fondo de Aseguramiento, así como actividades de educación ambiental.

La comisión explicó que el lobo mexicano es el cánido silvestre más grande del país. Los adultos miden entre 130 y 180 centímetros de largo, pesan cerca de 33 kilogramos y presentan un pelaje café grisáceo en el dorso, más claro en el vientre y las patas. Se agrupan en manadas o pequeños grupos familiares, y se alimentan de especies como el venado de cola blanca, berrendos o conejos.

En el pasado, esta subespecie habitaba desde el norte hasta el centro de México, incluyendo regiones de Sonora, Chihuahua, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí y el Bajío. Sin embargo, la persecución y la pérdida de hábitat provocaron su desaparición en vida libre en 1980.

A partir de ese año, su recuperación dependió de un reducido grupo genético de apenas siete ejemplares rescatados de zoológicos y colecciones privadas. Esto implicó importantes desafíos para mantener la diversidad genética y evitar la endogamia, por lo que se diseñaron estrategias de emparejamiento tanto en cautiverio como al momento de liberar ejemplares.

Actualmente, la Conanp estima que existen entre 30 y 35 lobos en vida silvestre en México, aunque el censo binacional más reciente —realizado en 2024 por la agencia estadounidense U.S. Fish and Wildlife Service y la Conanp— confirmó entre 45 y 50 ejemplares libres en territorio nacional, y 257 más en el suroeste de Estados Unidos, particularmente en Arizona y Nuevo México.

Asimimo, se explicó queel nacimiento registrado en Campo Verde es especialmente relevante porque ocurrió fuera de las zonas núcleo tradicionales como la Reserva de la Biósfera Janos o el Rancho La Mesa. Esto demuestra que los lobos liberados se están adaptando al entorno, están formando manadas estables y se están reproduciéndose en libertad, una de las metas clave del programa de conservación.

Te puede interesar > Captan a dos jaguares cerca de Chichén Itzá; olfatean cámara trampa | Video

El lobo mexicano pasó de estar oficialmente extinto en vida silvestre a ser clasificado como especie en peligro de extinción, y hoy su futuro empieza a vislumbrarse con esperanza. Como destacó la Conanp, “este depredador tope —durante décadas visto como “el malo del cuento”— empieza a recuperar su lugar en los ecosistemas del norte del país”.