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Sheinbaum reconoció continuidad del gobierno de AMLO, es una creyente del proyecto obradorista: Cossío Díaz

El ministro en retiro, José Ramón Cossío dijo que la forma en que la presidenta Sheinbaum podría dejar un legado político en México, distinto al de López Obrador, sería aprovechando una crisis con Estados Unidos, o una crisis económica.

  • Redacción AN / KC
14 Jan, 2025 15:02
Sheinbaum reconoció continuidad del gobierno de AMLO, es una creyente del proyecto obradorista: Cossío Díaz
Foto: Cuartoscuro

El ministro en retiro, José Ramón Cossío, analizó la presentación del informe de los 100 días de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, del que resaltó que habrá “estricta” continuidad en las políticas del gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que la primera afirmó que no se desmarcará de proyecto lopezobradorista.

Me parece de una gran importancia, porque no sé si lo hace de nuevo como finta política o si en verdad así va a ser, seis años de una estricta y rigurosa continuidad al plan que le dejó establecido el presidente López Obrador.

Durante su intervención en ‘Aristegui en vivo”, Cossío sostuvo que la narrativa del gobierno de Sheinbaum se enmarca dentro de un discurso de continuidad, centrado en los logros de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador.

“Lo que celebra la presidenta Sheinbaum como logros de su gobierno es el incremento en las becas, el mantenimiento en los pagos, la continuidad de las obras, de las infraestructuras, de los temas de salud, es decir, no está planteando nada que sea novedoso de su gobierno”.

Pocos cambios en seguridad

Sin embargo, refirió que hubo algunos cambios en materia de seguridad, como la función policial que tendrán la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana que encabeza Omar García Harfuch,. Sin embargo, apuntó que aún así, la presidenta Sheinbaum  mantendrá continuidad “no sé si convencida o subordinada materialmente, ideológicamente”, expresó.

Agregó que en el mensaje de la presidenta no hubo alusión a un mayor uso de “inteligencia e investigación, inteligencia como servicios de investigación, servicios de conocimientos respecto a los delitos, entonces son pocos los cambios que se pudieron introducir”, destacando la idea de que va a existir una coordinación entre gobiernos.

Mencionó que lo novedoso, es la disposición en el artículo 21 de la Constitución, es el establecimiento de un Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Incluso, expuso que la mandataria hizo solo un recuento de reformas constitucionales que no le pertenecen a su administración y que fueron presentadas durante la administración de López Obrador “como si dijera ella, cumplí con lo que me dejaron”.

Según Cossío Díaz, Sheinbaum evitó abordar los problemas estructurales y profundos en materia de seguridad y violencia que siguen afectando al país.

En el informe de la presidenta no se menciona la situación de las personas desaparecidas, no se habla de la violencia contra los migrantes, ni del trabajo en torno a los decomisos de drogas, indicó.

El analista agregó que la violencia sigue siendo uno de los principales problemas del país y que la estrategia del gobierno pareció centrarse en la reducción de los homicidios, una métrica que, afirmó Cossío, no captura la magnitud del problema.

Pareciera que toda la estrategia de Seguridad Nacional, que todos los delitos, que toda la estructura de Seguridad Nacional tiene que ver con el número de homicidios dolosos por arma de fuego o por no arma de fuego, por algún otro medio comisivo.

Militarización afecta libertades civiles

Además, Cossío advirtió que la militarización de las fuerzas de seguridad, especialmente con la presencia del Ejército en tareas de seguridad pública, genera una serie de preocupaciones sobre el futuro del Estado de derecho y la posible afectación de las libertades civiles.

En este sentido, consideró que la propuesta de Sheinbaum de fortalecer la Guardia Nacional no ofrece una solución a largo plazo a los problemas de violencia y descomposición social que aquejan al país.

Según Cossío, Sheinbaum justificó su plan con tres pilares, “humanismo mexicano“, dedicación y honestidad; sin embargo, cuestionó la eficacia de este enfoque en un país “tan lastimado” por la violencia y la desigualdad.

Decir que estos son los sustentos de una política pública tan importante es una respuesta muy pobre.

Otro aspecto en el que Cossío se mostró crítico fue “la falta de propuestas de Sheinbaum sobre temas clave de derechos humanos”.

“No se menciona nada sobre el estado de los derechos humanos en el país, ni sobre las víctimas de la violencia y el crimen organizado”, apuntó el exministro, quien destacó que, aunque la agenda de derechos humanos ha sido parte del discurso del gobierno de López Obrador, aún persisten problemas graves como las desapariciones forzadas, la tortura y la impunidad.

Cossío sugirió que, en lugar de un enfoque reactivo ante los problemas de derechos humanos, Sheinbaum debería implementar políticas proactivas que garanticen la justicia social y la reparación integral para las víctimas.

Asimismo, el ministro en retiro, consideró que hasta el momento la única iniciativa de la presidenta es el Plan México, aunque consideró que le dedicó más espacio a la nueva relación con México con Estados Unidos, a partir de que Donald Trump y su gabinete tomen posesión del cargo.

Sin embargo, dijo que también en el tema de Trump  hay “una continuidad, al menos retórica, respecto de lo que el presidente López Obrador decía”.

La tradición cultural mexicana, las reservas morales y culturales de nuestra historia, es decir, toda esta retórica con la cual el presidente López Obrador trató en su momento de paliar los efectos de la presidencia, sobre todo del presidente Trump.

Dijo que algunos ángulos o frases respecto a la relación con Estados Unidos mantiene cercanía con el discurso del expresidente AMLO: “Entonces, ¿Dónde realmente hay una novedad, una innovación de la presidenta Sheinbaum?”, cuestionó.

Sheinbaum podría ser títere o creyente del proyecto obradorista

Cuestionado sobre la postura del expresidente Ernesto Zedillo, quien describió a Andrés Manuel López Obrador como un “caudillo oculto”, José Ramón Cossío dijo que la expresión pudo plantearse en dos sentidos, el primero, apuntando hacia una figura que “actúa en la sombra, moviendo los hilos, rodeando a la presidenta Sheinbaum de todo su equipo, sus asesores y comunicadores, para dejarla completamente subordinada”.

Desde esta perspectiva, agregó Cossío, “para hacerla, y lo digo en términos metafóricos, no quiero ser grosero ni ofensivo, una especie de títere, donde le están moviendo los hilos, esta es una posibilidad y es a la que se refiere el presidente Zedillo”.

Sin embargo, el exministro planteó una segunda posibilidad, en la que se considera a sí misma, parte de la continuidad.

“¿Y si Claudia Sheinbaum de verdad creyera completamente en el proyecto y ella se considerara como mera realizadora de un legado que la trasciende? Mi sexenio es un sexenio de continuidad, no porque estoy subordinada a un hombre, sino porque creo en el proyecto generado por ese hombre”.

Ante ello, Cossío afirmó que el discurso de Sheinbaum no deja dudas sobre su alineación con López Obrador.

“Si uno se tomara en serio la textualidad de este informe, es muy poco probable que ella lo haya escrito. Seguramente lo encargó, le prepararon borradores, y ella lo ajustó a su estilo”.

El ministro en retiro destacó que Sheinbaum está rodeada de una estructura política que limita sus márgenes de acción.

“Tiene una mayoría en el Congreso que no controla directamente, tiene al hijo del presidente en el partido. Sus márgenes de maniobra son prácticamente cero, y en su estrategia política lo único que le queda es mantener ese discurso como una forma de sobrevivencia”.

Cossío comparó la relación de Sheinbaum y López Obrador con otras figuras históricas y citó el ejemplo de Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles, “Cárdenas, o Echeverría y López Portillo. Pero, en este caso, la presidenta Sheinbaum no tiene los espacios para generar un rompimiento”.

Finalmente, cuestionó cómo Sheinbaum podría construir su propio legado político.

“Eso hoy es muy difícil saberlo. Tal vez, en unas semanas o meses, aprovechando una crisis con Estados Unidos o algún problema económico, podría abrirse un espacio lo suficientemente amplio para constituir su propio proyecto de gobierno”.

Cossío concluyó que, por el momento, “ella está asumiendo expresamente unas condiciones de subordinación, no solo por el entramado político, sino por una convicción personal respecto a un proyecto en el que ha decidido participar y continuar”.