Naturaleza AristeguiNaturaleza Aristegui

Una buena de López Obrador, pero… | columna de David Ordaz

La pobreza no solo se mide por lo que entra al bolsillo, sino por lo que falta en la casa. En tanto esos vacíos no se llenen, cualquier victoria podría parecer pírrica.

  • David Ordaz
19 Aug, 2025 08:15
Una buena de López Obrador, pero… | columna de David Ordaz
Foto: Archivo Cuartoscuro

Por: David Ordaz

Desde su primera campaña presidencial en 2006, Andrés Manuel López Obrador acuñó una frase: “Por el bien de todos, primero los pobres”, un lema que a la postre sirvió como narrativa de su gobierno.

De hecho, en su última mañanera expresó: “por el bien de todos primero los pobres no solo fue una proclama, ni solo fue un lema; se convirtió en una realidad porque logramos, ese es otro timbre de orgullo, logramos reducir la pobreza y la desigualdad”.

Hace unos días fueron publicados los resultados de la Pobreza Multidimensional 2024, donde se muestra que los mexicanos en condición de pobreza pasaron de 51.9 millones en 2018 a 38.5 millones en 2024, lo que representa una disminución de 13.4 millones durante el sexenio anterior.

Incluso, el porcentaje de pobreza extrema también registró un retroceso sostenido, confirmando una tendencia de mejora en los indicadores más críticos, pues se redujo en el mismo periodo de 7 a 5.3 millones, lo que indica que 1.7 millones de mexicanos salieron de esta condición.

Lejos de ser un hecho aislado, el dato dado a conocer por el Inegi está respaldado por indicadores como el salario real, masa salarial, ingresos y las transferencias derivadas de programas sociales, lo que confirmaría que las políticas públicas favorecieron este incremento.

Sea como sea, esta es una buena noticia que se puede atribuir al sexenio pasado, sin embargo, la alerta debe seguir para el actual gobierno.

Durante la presentación del informe, la presidenta del Inegi, Graciela Márquez, señaló que si bien se ha superado la línea de pobreza, la población todavía carece de servicios básicos o seguridad social, siendo la salud, el tema más sensible y de preocupación general.

En el reporte se explica que la carencia de servicios de salud sigue siendo 18 puntos porcentuales más alta que en 2018, esto implica que, pese al avance reciente, la falta de cobertura prácticamente se duplicó durante el sexenio pasado.

De hecho, voces críticas han señalado que la reducción de la pobreza medida por ingresos es difícilmente analizable cuando la población convive con déficits graves en derechos básicos, generando dudas sobre la sostenibilidad de los logros alcanzados.

Sabemos que vamos a paso muy lento, pero ahí vamos. Hoy estos datos nos confirman que, si es posible mover a millones de personas por encima de la línea de pobreza en poco tiempo, rompiendo con una narrativa de gobiernos pasados y hasta de organismos como el Banco de México, quienes por años sostuvieron que temas como el incremento al salario mínimo provocarían una gran crisis económica.

La pobreza no solo se mide por lo que entra al bolsillo, sino por lo que falta en la casa. En tanto esos vacíos no se llenen, cualquier victoria podría parecer pírrica. El gobierno actual tiene todo a su alcance para lograr ese avance.

Temas Relacionados